Curso nuevo y nuevas oportunidades
Hace ya algunos días que debería haber actualizado el blog, pero entre unas cosas y otras nunca acabo por tener un rato para ponerme delante de la página de mi bitácora originaria. Ahora por fin tengo un ratito, así que aquí tenéis un resumen de los últimos meses:
Desde el dos de septiembre estoy trabajando en un cole nuevo en Terrassa, de profesor de FP, y por ahora las clases van muy bien. El ciclo en el que doy la mayoría de las clases es el mismo que impartía el año pasado, Atención a Personas en Situación de Dependencia, con la diferencia de que este año trabajo por la mañana y así puedo pasar la tarde entera con mi retoño, lo cual no tiene precio. Por si fuera poco, sólo tengo siete alumnas en el curso, lo cual es una maravilla. Cuánta razón tenía aquel que dijo una vez en la contraportada de La Vanguardia que "la felicidad es ir caminando a trabajar".
Anteayer celebré cinco años de pareja con mi mujer. Estos cinco años han sido probablemente los más interesantes, felices, excitantes y provechosos de mi vida. Han pasado muchísimas cosas y he cambiado no sólo de residencia y de profesión, sino que me atrevería a decir que he dejado de ser un niño grande y sobreprotegido para ser un padre responsable y más o menos sacrificado. Muchas cuestiones que hace cinco años no me planteaba me son ahora completamente normales e incluso preocupantes: llegar a fin de mes, tener la casa en orden, cocinar para tres, poder ir o no de vacaciones, rendir en mi trabajo, contribuir a que mi mujer y mi niño sean felices y no les falte nada que yo pueda proporcionarles, etc...Hay veces en que no sé si soy un buen padre y compañero, y me falla la energía y las ganas de hacer cosas y de no dejarlo todo para el último momento. Vivo una vida cansada y llena de obligaciones, es cierto, pero cuando mi retoño me sonríe y me dice "Papa" cuando le voy a recoger a la escuela, el cansancio parece desaparecer. Cuando mi mujer me da un beso porque le ha gustado mi tortilla de patatas y yo me despachurro a su lado para ver el APM en la tele antes de quedarme dormido me doy cuenta de que seguramente hay padres más sacrificados, pero no creo que haya padres mejor acompañados y más queridos que yo. Y eso es suficiente para que las energías puedan volver al día siguiente. Por otro lado, hace cosa de un año estaba mucho más cansado y agobiado, así que ahora sólo pienso que soy muy afortunado por todo lo que tengo.
Y sí, como habéis podido leer, hace unos meses que publiqué mi primera novela. Aún no sé cuántos ejemplares he vendido ni cuánto dinero he ganado, aunque seguramente será muy poquito, unos diez o veinte euros. Es lo que tiene que la editorial apenas invierta en promoción. Hace cosa de un mes publicaron la entrevista que me hicieron a principios de julio en el Diari de Terrassa, y durante aquellos días llegué a estar situado en el número 4000 de libros vendidos de Amazon, pero ahora ya hace semanas que no vendo un solo ejemplar y vuelvo a estar en el cincuenta y pico mil.
Sigo cantando, pero he cambiado de profesor de canto para poder tener un poco de continuidad, ya que el anterior estaba muy solicitado. El día 9 cantaré un par de arias en el Ateneu de Terrassa y a finales de marzo cantaré en con el coro dels Amics de l'Òpera i la Sarsuela de Terrassa en las dos funciones que haremos de "La Traviata" en el Auditori de Terrassa.
Pero lo mejor viene al final: Pau está hecho una ricura, una auténtica maravilla. Habla por los descosidos, se sabe casi todos los colores y reconoce su nombre escrito y algunas letras sueltas como la P, la A, la O y la M minúscula. El día 22 de este mes celebraremos los dos años del pequeñín y Sandra y yo daremos un pequeño conciertillo de flauta y guitarra en la guardería a la que llevamos a Pau. Mi niño es lo mejor que me ha pasado, y Sandra la mejor madre que podría haber escogido para él. Es dulce y tierna, siempre está por él, le trata con mucha mano izquierda y sabe en todo momento lo que tiene que hacer con Pau.
Si algún día Sandra lee esta entrada, quiero que sepa que enamorarme de ella es la mejor elección que he hecho en la vida.
Desde el dos de septiembre estoy trabajando en un cole nuevo en Terrassa, de profesor de FP, y por ahora las clases van muy bien. El ciclo en el que doy la mayoría de las clases es el mismo que impartía el año pasado, Atención a Personas en Situación de Dependencia, con la diferencia de que este año trabajo por la mañana y así puedo pasar la tarde entera con mi retoño, lo cual no tiene precio. Por si fuera poco, sólo tengo siete alumnas en el curso, lo cual es una maravilla. Cuánta razón tenía aquel que dijo una vez en la contraportada de La Vanguardia que "la felicidad es ir caminando a trabajar".
Anteayer celebré cinco años de pareja con mi mujer. Estos cinco años han sido probablemente los más interesantes, felices, excitantes y provechosos de mi vida. Han pasado muchísimas cosas y he cambiado no sólo de residencia y de profesión, sino que me atrevería a decir que he dejado de ser un niño grande y sobreprotegido para ser un padre responsable y más o menos sacrificado. Muchas cuestiones que hace cinco años no me planteaba me son ahora completamente normales e incluso preocupantes: llegar a fin de mes, tener la casa en orden, cocinar para tres, poder ir o no de vacaciones, rendir en mi trabajo, contribuir a que mi mujer y mi niño sean felices y no les falte nada que yo pueda proporcionarles, etc...Hay veces en que no sé si soy un buen padre y compañero, y me falla la energía y las ganas de hacer cosas y de no dejarlo todo para el último momento. Vivo una vida cansada y llena de obligaciones, es cierto, pero cuando mi retoño me sonríe y me dice "Papa" cuando le voy a recoger a la escuela, el cansancio parece desaparecer. Cuando mi mujer me da un beso porque le ha gustado mi tortilla de patatas y yo me despachurro a su lado para ver el APM en la tele antes de quedarme dormido me doy cuenta de que seguramente hay padres más sacrificados, pero no creo que haya padres mejor acompañados y más queridos que yo. Y eso es suficiente para que las energías puedan volver al día siguiente. Por otro lado, hace cosa de un año estaba mucho más cansado y agobiado, así que ahora sólo pienso que soy muy afortunado por todo lo que tengo.
Y sí, como habéis podido leer, hace unos meses que publiqué mi primera novela. Aún no sé cuántos ejemplares he vendido ni cuánto dinero he ganado, aunque seguramente será muy poquito, unos diez o veinte euros. Es lo que tiene que la editorial apenas invierta en promoción. Hace cosa de un mes publicaron la entrevista que me hicieron a principios de julio en el Diari de Terrassa, y durante aquellos días llegué a estar situado en el número 4000 de libros vendidos de Amazon, pero ahora ya hace semanas que no vendo un solo ejemplar y vuelvo a estar en el cincuenta y pico mil.
Sigo cantando, pero he cambiado de profesor de canto para poder tener un poco de continuidad, ya que el anterior estaba muy solicitado. El día 9 cantaré un par de arias en el Ateneu de Terrassa y a finales de marzo cantaré en con el coro dels Amics de l'Òpera i la Sarsuela de Terrassa en las dos funciones que haremos de "La Traviata" en el Auditori de Terrassa.
Pero lo mejor viene al final: Pau está hecho una ricura, una auténtica maravilla. Habla por los descosidos, se sabe casi todos los colores y reconoce su nombre escrito y algunas letras sueltas como la P, la A, la O y la M minúscula. El día 22 de este mes celebraremos los dos años del pequeñín y Sandra y yo daremos un pequeño conciertillo de flauta y guitarra en la guardería a la que llevamos a Pau. Mi niño es lo mejor que me ha pasado, y Sandra la mejor madre que podría haber escogido para él. Es dulce y tierna, siempre está por él, le trata con mucha mano izquierda y sabe en todo momento lo que tiene que hacer con Pau.
Si algún día Sandra lee esta entrada, quiero que sepa que enamorarme de ella es la mejor elección que he hecho en la vida.
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