Adiós a Pili
El jueves pasado Pili y yo lo dejamos definitivamente. No fue un “hasta nunca” cargado de ira o de resentimiento del uno contra el otro. No fue tampoco un adiós definitivo ni una invitación definitiva a dejarnos de ver para siempre. No. Simplemente ella fue muy sincera conmigo y me dijo que no se veía con fuerzas para pasar el resto de su vida conmigo. Me dijo algo que a veces yo también había pensado, algo a lo que yo también le había dado vueltas y que muchas veces me había resistido a decirle claramente o a pensarlo en esos mismos términos. Somos muy buenos amigos y lo seguiremos siendo en el futuro, no hubo ni una sola palabra llena de resentimiento en nuestra despedida. Simplemente vimos que nos convenía más ser amigos que pareja formal. Quién sabe si algún día volveremos a ser novios, si nos arrepentiremos de habernos dicho adiós y querremos volver a estar juntos en un futuro. Lo que está claro es que somos buenos amigos, pero quizá no era lo más conveniente que siguiéramos junto